Este viernes, nuestra obra de teatro educativo se despidió de la 4º edición de Tecnópolis con una última función a sala llena. Miles de jóvenes del conurbano bonaerense que participan del programa PROG.R.ES.AR.  pudieron disfrutar de la obra que reflexionar  sobre el mundo laboral a través del arte y la participación.

La propuesta artística, llevada adelante por nuestros actores y coordinadores, fue vista por más de 3 mil jóvenes que desde mediados de julio pasaron por el stand “Garante de Trabajo, Garante de Derechos”, el espacio del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación dentro de la feria de ciencia, arte y tecnología de Villa Martelli, en Vicente López. De esta forma, se convirtió en uno de los espacios más atractivos que ofreció Tecnópolis a las 4.700.000 personas que este año visitaron la muestra.

"Es el cuarto año que el Ministerio de Trabajo tiene un stand en Tecnópolis y nos parece que es el lugar en el que hay que estar por la cantidad de jóvenes que visitan el predio" dijo Federico Ludueña, el Subsecretario de Promoción del Sector Social de la Nación, que estuvo presente en la última función dialogando con los jóvenes presentes.  "Una Argentina con trabajo y educación para los jóvenes se hace con esfuerzo pero también con alegría", agregó el funcionario.

Con improvisaciones cómicas, los artistas representan situaciones habituales del proceso de búsqueda e inserción al mercado laboral que atraviesan los jóvenes reflexionando sobre los derechos laborales y las políticas públicas que contribuyen a ampliar las oportunidades de empleabilidad y garantizar a las nuevas generaciones el acceso a un empleo digno.

En este sentido Marcelo Koyra, Director Ejecutivo de nuestra Fundación, sostiene que  “el programa PROG.R.ES.AR. llegó para rectificar las políticas públicas que, en la última década, buscan favorecer la capacitación y la inclusión social de los jóvenes, como el  programa “Jóvenes con Más y Mejor Trabajo”, que ha capacitado a más de dos millones de jóvenes de todo el país, acompañándolos en el proceso de inclusión al mercado laboral”.

Sobre la experiencia en Tecnópolis, Marcelo asegura que "el teatro educativo nos brinda una herramienta innovadora para reflexionar sobre los derechos laborales, articulando la historia de los procesos sociales con la experiencia concreta de tantos jóvenes que actualmente se están formando para ingresar al mundo del trabajo”.